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20 de diciembre de 2013

Esta vez no sé ni como ponerle el título del blog.. jaja. Es que me han pasado situaciones muy extremas en estos dos últimos días.
En la escuela de mi hijo, hicieron el programa navideño.. así que tenía que comprarle un gorro de Papá Noel para la presentación. Fui a ver en los puestos navideños que hay en la calle y conseguí el famoso gorro. Pero cuando estaba por subirme de nuevo al auto, se me acercó un tipo que quería que le regalara una moneda. La verdad es que cada que puedo evito esas situaciones. Pero esta vez dije: ok, es Navidad, le daré algo. Seguro lo gasta en drogas, no estoy orgullosa de fomentar cualquier que sea su vicio, pero ojalá lo invierta en algo más provechoso como comida. Me senté en el auto, abrí un poco la ventana y le dí una moneda. El tipo empezó a gritarme que le dé por lo menos 100 sucres!! Para los que no viven en Ecuador, el sucre dejo de existir allá por el 99, y pasamos a estar dolarizados. Tomando en cuenta que cuando cambiamos la moneda todas las cosas pequeñas costaban alrededor de 15.000 a 20.000 sucres... el hecho de que me pide 100 sucres, me indicaba que el pobre se quedó varado a mediado de los 80´s. Le dije que no tenía más mientras subía el vidrio rápidamente. Siguió insultándome tratándome de todos los nombres, hasta que no se le ocurrió mejor idea que lanzar la moneda contra el vidrio de mi auto! Solo atiné a meter primera y arrancar el auto. Cuál es su problema? Sentí una mezcla de miedo con malestar e iras acerca de lo que me había sucedido. Seguramente estaría bajo los efectos de alguna droga, pero de todas formas, decidí no volver a pasar por esa calle a menos de que sea estrictamente necesario.

Para terminar mi semana, esta mañana fui a dejar a mi pequeño a clases como todas las mañanas. Dejo el auto parqueado y de ahí tenemos que caminar unos 100 metros hasta la entrada del colegio. Estos días han sido muy lluviosos, y habían muchos charcos de agua en la calle y las veredas. Así que decidí llevarlo en brazos para que no se le mojaran los zapatos. No les pasa que parecen que tuvieran un imán para pisar justo dónde no se debe? Bueno, así que lo cargué y como llovía todavía un poco, llevé el paraguas. Estábamos conversando y veníamos cantando cuando pasó un auto a toda velocidad  justo encima de uno de esos charcos y nos salpicó toda esa agua sucia encima. Obviamente el conductor no hizo ni el intento de frenar antes del charco y menos después de pasarlo. Siguió a la misma velocidad como si nada. Se podrán imaginar, yo empapada desde la cintura para abajo. Menos mal se me ocurrió llevarlo en brazos, sino mi pobre pequeño hubiera sido literalmente bañado por aquel desgraciado. Menos mal siguió recto, porque a este no le hubiera lanzado una moneda, sino el paraguas y la cartera entera... y las que son mamás saben bien a que tipo de cartera me refiero! pero ese será tema de otro post.
A muchas personas cercanas les ha pasado lo mismo (ser bañadas en la calle por un conductor poco considerado con el peatón).. a uds les ha pasado? es uno de los peores momentos cuando a una le pasa y encima tiene que quedarse con la misma ropa todo el día, porque en la oficina no hay mudada de cambio por si acaso. De pronto sería algo a considerar en épocas de invierno!

Dicho esto, esta tarde nos vamos de viaje con mi familia.. vamos a tratar de disfrutar de estar lejos de la ciudad y de la excitación de las fiestas. Que tengan todos una linda navidad, que la pasen en familia y sus casas se llenen de buenos momentos.
Beso!